De
adolescente, Nick tenía un plan. Jack, Sandy y él, sus mejores amigos, tendrían
algún día su propio garaje en Little Italy. Entonces, él podría casarse con
Juliet y apuntarse a los cursos nocturnos de la universidad. Él sería
ingeniero, construiría puentes y quizá aviones. No se conformaría con ser
mecánico o con tener un restaurante como su padre. Y jamás, jamás, entraría en
la Mafia.
Pero él
ya tendría que saber que los planes siempre salen mal. Jack le traiciona y Nick
se ve obligado a trabajar a las órdenes de Silvio para proteger a Sandy. Aun
así, cree que podrá salir de ese mundo y le oculta la verdad a Juliet. Ella no
tiene nada que ver con Little Italy ni con las pesadillas a las que él tiene
que enfrentarse.
Una
noche, sin embargo, Juliet aparece en el último lugar donde debería estar.
Tras la
muerte de Juliet, Nick enloquece y se convierte en lo único que no quería ser:
un gánster.
Han
pasado los años, Al Capone está en la cárcel y las familias de la Mafia de
Chicago y de Nueva York tienen que negociar. Nick es la mano derecha de
Cavalcanti, el capo de Nueva York, y su misión es velar por los intereses de su
Don, que además es el hombre que lo salvó de perderse para siempre en el
infierno.
Ahora mismo estoy con Vanderbilt Avenue, para poder leerme después este. Qué ganitas...
ResponderEliminarBesos.^^