Libro II Trilogía Yo te miro
Una única regla, sólo una única condición: no enamorarse jamás, pero a veces las cosas ocurren sin que lo esperes y finalmente Elena deja Venecia para trasladarse a Roma junto a Filippo y comenzar su vida donde la dejó cuando conoció a Leonardo. Ha comenzado a trabajar restaurando la Iglesia de San Luigi dei Francesi y por fin recupera la tranquilidad y la estabilidad que siempre ha querido; pero el destino siempre gira inesperadamente y un día se encuentra con el hombre que le hizo descubrir un mundo nuevo: Leonardo, que ha vuelto y la desea más que antes incluso, pero Leonardo esconde un secreto que finalmente sale a la luz. ¿Podrá Elena aceptar las consecuencias de ese secreto?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Opina, comenta, comparte!