Hace cuatro años, Jocelyn Butler dejó atrás su trágico pasado en Estados Unidos y comenzó de nuevo en Edimburgo. Enterrándose en el dolor, ignorando sus demonios y avanzando sin ninguna atadura real, ha funcionado bien para ella hasta ahora, pero cuando Joss se muda a un fantástico apartamento en Dublin Street, su mundo cuidadosamente reservado es sacudido hasta sus cimientos por el sexy hermano mayor de su nueva compañera de piso.Braden Carmichael es un hombre que siempre consigue lo que quiere. Y lo que quiere es a Jocelyn en su cama. Sabiendo cuán nerviosa está Joss sobre cualquier tipo de relación, Braden propone un acuerdo sexual que debe satisfacer la intensa atracción entre ellos sin que se convierta en algo "más". Una curiosa Jocelyn está de acuerdo, en absoluto preparada para el escocés y su inquebrantable determinación de desnudar a la joven testaruda... hasta su propia alma.
Empecé a leer esta novela, sin saber muy bien hacia dónde se decantaría, si hacia el romanticismo puro y duro o hacia el erótico, tan de moda. Y mi sorpresa fue mayúscula, al adentrarme en una fantástica historia de amor y erotismo, con personajes profundos, dramática y salpicada de momentos cómicos.
La autora nos abre en canal a Joss, nos hace meternos dentro de su cabeza y su corazón. Y aunque a veces su terquedad nos haga desesperarnos, la llegamos a entender completamente.
En cambio, su contrapunto en esta historia es Branden, un hombre seguro, equilibrado, triunfador y terriblemente atractivo y sexy. Pondrá el mundo de Joss patas arriba, haciendo que sus pilares se desestabilicen. Él lo tiene claro, la quiere para él (aún me flipa el hecho de que todos los protagonistas masculinos del género nos traten como una propiedad, un mueble, un objeto deseado, pero en este género es lo que hay y la verdad, gusta), y no dudará en romper todas las barreras que ella interpone. Eso sí, ninguno de los dos sabe de los miedos de cada uno. El hermetismo emocional que poseen, sobre todo Joss, hace difícil el acercamiento. Por lo que la única e irremediable forma de que se acerquen es en el plano sexual, cargado de erotismo y pasión.
Joss no quiere atarse a nadie, ni amorosamente ni amistosamente, ni de ninguna forma. Ha perdido todo lo importante en su vida, se siente culpable por ello, y no quiere volver a herirse ni herir a nadie. Pero lo que siente por su nuevo entorno, las personas que lo componen y por Branden, la están volviendo loca.
De los personajes secundarios, destaco a Ellie, la más importante a mi parecer. Una chica dulce, encantadora, que se mete en el bolsillo a Joss desde el primer momento. Un personaje entrañable. El resto, sencillos pero que se cuelan poco a poco en la trama y la hacen muy interesante.
Además de los momentos dramáticos, y momentos en los cuales me he emocionado, hay varios cómicos en los que no he podido dejar de sonreir. Son narrados con tanta naturalidad que no puedes evitar esbozar una sonrisa.
Respecto a la autora, me considero fan desde ya, y estoy a la espera de hacerme con alguna obra más, par disfrutar de su buen hacer. Ha sido una grata sorpresa para mí.
En definitiva, una trama sencilla con personajes complejos y complicados, que te engancha desde el inicio y te deja un fantástico sabor de boca. De esos que piensas que no deberían tener fín.
Se trata de una historia de amor, de pasión, pero sobre todo de una historia de superación personal preciosa y de la que he disfrutado muchísimo.
100% recomendable. No perderás el tiempo si la lees, al contrario, te va a encantar.
Leído en formato electrónico. 368 pág.
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