El Bebedor de Lágrimas es la primera de una trilogía de novelas
centrada en el fantasmagórico universo de la universidad de Carnwell en la
pequeña isla de Coversgate, una de las más reputadas de la costa este
norteamericana. Allí viven también las leyendas que repiten su nombre desde el
más oscuro de los pasados... El bebedor de lagrimas es un joven fantasma
enamorado, traicionado por su prometida, que juró matar a todo aquel que se
atreviera besar a una mujer comprometida con otro hombre y le basta la primera
lágrima de una novia arrepentida para desenvainar su espada y consumar su
venganza.
Sinceramente, aunque tenía referencias sobre este autor muy buenas, he ido a escoger el peor libro para conocerlo, en el cuál experimenta con un género ajeno a su estilo habitual. Y vaya chasco me he llevado.
Aunque el argumento me pareció interesante, por lo de la leyenda del bebedor de lágrimas, la traición amorosa y la venganza, una vez comienzas el libro, ves que pierde el fuelle y se distancia de lo que podía haber sido una buena historia y se convierte en otra historia más enfocada al público juvenil al más puro estilo Hermosas criaturas y similares.
El estilo no me ha gustado, se hace muy denso en muchos pasajes, demasiado recargado para ser carne de cañón para jóvenes, y tampoco me ha gustado la falta de cercanía de los personajes. El autor los presenta con una distancia que hace muy difícil sentir apego hacia ellos. No hay profundidad ni intensidad, como si te lo estuviera narrando el vecino sin ningún tipo de interés. Todo ocurre muy rápido, has de imaginar lo que sienten los personajes sin conocerlos apenas, y el romanticismo brilla por su ausencia. No he sentido ninguna empatía por la pareja protagonista, todo muy frío de cara al lector, pero has de creer que existe un amor profundo que el autor no te ha mostrado en ningún momento. ¿Cómo te la pueden vender como una historia de amor, cuando no la sientes por ningún sitio?
Un libro muy lineal, sin sobresaltos ni en los momentos más sangrientos, ni una pestaña se me ha movido. Me ha decepcionado bastante, porque la idea no era para nada mala, leyendas, venganzas...pero ha acabado siendo una historia pesada, inverosímil, lejana y fría.
Parece ser que es el comienzo de una saga, la cuál no pienso continuar leyendo, ya que considero esta primera entrega infumable la verdad.
Vamos, esta obra va de cabeza a la sección Best-deceptions.
No perdáis el tiempo.
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