Bilblioteca

lunes, 10 de octubre de 2016

Y de repente, un extraño - Yolanda Revuelta

                       Jon Zelaya, un rico arquitecto de Madrid, decide ponerse tras el volante de su lujoso coche para huir de un doloroso pasado. Finalmente decide poner rumbo al norte de España, a la preciosa zona costera de Liencres, situada en Cantabria. Allí descubrirá una bonita casa que le han dejado sus abuelos en herencia. Malena Rivas es una mujer solitaria por su profesión. Ella es fotógrafa y trabaja para una de las revistas más exclusivas, pero un acontecimiento familiar hace que tome una firme decisión: tendrá que hospedarse durante varias semanas en casa de su abuela, en Liencres.
Lo que ella no sabe es que su forma de ver el mundo está a punto de cambiar, porque Jon Zelaya está a punto de entrar en él.

Y sin querer... - Lisa Aidan

               Michael es un joven profesor sustituto cansado de dar vueltas por los centros del país. El día que consigue una plaza fija en un instituto que además está cerca de su familia, no se lo piensa dos veces y acepta encantado el puesto. En su nuevo destino conocerá a Amanda, una alumna destacada y la hija de la mejor amiga de su hermana mayor. Entre los dos se forjará una amistad que crecerá día a día hasta que, sin saber cómo ni cuándo, los sentimientos cambiarán y ambos sufrirán ante la imposibilidad de mantener una relación real.
Cuando el amor llega pero la vida se interpone ¿qué puedes hacer?

No puedo perderte - Alexia Seris

                
No puedo negar quién soy. Soy Nina Miller, la única heredera de un empresario millonario, tengo amigos, estatus y más dinero del que puedo gastar, pero me siento... incompleta. Quiero hacer algo en la vida, quiero ser algo másque la hija de mi padre. Quiero sentir que pertenezco a algo y a alguien. Conocí a Jayden el peor día de mi vida. Él tambaleó mi mundo, lo puso del revés y me hizo sentir algo que jamás había sentido. Te quiero Jayden. Conocí a Nina en un mal momento. Ella puso mi vida patas arriba, no sé cómo lo hizo, pero sin ella me siento realmente solo. Estoy llegando al borde de mi paciencia. Apenas soporto relacionarme con el resto del mundo, las sonrisas de las mujeres me sacan de mis casillas y mi familia me consume grandes dosis de energía. Mi trabajo es lo único que me hace mantener la cordura, aunque últimamente lo consigo a duras penas. No puedo perderte Nina.